Me encanta poner las manos a los lados de mi cara y mirar a JAN como a través de un túnel.
Cuando hago esto, en seguida él acerca su carita y se parte de risa.
Nos vemos las caras muy de cerca, es muy divertido. Es un juego de complicidad entre padre e hijo.
Se lo hago una y otra vez y siempre se troncha.
Hoy no ha querido dormir la siesta así que esta noche estaba agotado, cuando está tan cansado se queja por todo y gruñe un montón.
No ha querido cenar mucho y al rato se ha quedado dormidito.
JAN, nos vemos en el túnel de la risa…
Jajaja ¡qué mono!
No hay nada más bonito que la risa de un niño…
Un beso enorme a los tres!
Mi tío lo que hace es con sus manitas, cuando lo va a bañar , hace que lo mete y hace UI y lo levanta y se troncha de risa .. !! Puedes intentarlo también con Jan 🙂
Cuando recuerdo momentos especiales de mi niñez, momentos tan aparentemente simples como este del túnel de la risa, siempre termino pensando: no cambio a mi padre por ningún otro del mundo, ni con todo el oro del mundo.
Jan cariño, cuánta suerte tienes. Ya me darás la razón, cuando cuentes unos años más.
Me ha encantado tu última frase…
¡Siempre tan geniales! Un beso a los tres.
Que bonito Bernardo, me ha encantado el tunel de la risa.
Muchos besos para todos, me acuerdo mucho de vosotros, y mas besos para el pequeño de ojos azules