El otro día JAN cogió el sombrero, se lo puso y comenzó a caminar por la casa.
Nos partíamos de risa y él cada vez se crecía más.
¡Fue divertidísimo!
Estaba muy gracioso moviéndose de un lado a otro con el sombrero que se le caía y le tapaba la cara. Todo un clown.
Es un artista.
🙂
No es que sea un artista, ¡es que es un artistazo!
Me encanta Jan, me encanta vuestra bonita familia y me encanta vuestro blog. Gracias por actualizar cada día, pues aunque no nos pronunciemos siempre, estoy segura de que todos los días muchos esperamos expectantes y emocionados una nueva entrada.
De verdad, creo que esta es una grandísima forma para normalizar la anormalidad que nos rodea 😉
Un abrazo.