Hoy estaba yo tosiendo bastante, de pronto JAN se acercó a mí, me puso la mano en la cabeza y me dijo: «mi amor«.
Me derretí.
Luego se puso a hacerme mimos y me dio un beso.
Y de pronto me dijo: «mejor«.
¡Increíble!
No deja de sorprenderme este pequeñajo.