JAN lleva unos días que llega dormido en la ruta.
El pobre queda agotado del colegio, hoy por ejemplo tenía piscina, así que normal.
Lo bueno es que no le cuesta despertarse, ni tampoco volver a dormirse a la noche.
Ahora ya está soñando en su camita. 🙂
Hacía tiempo que no visitaba vuestro blog. Qué mayor y qué guapo está Jan!
Me encanta saber de vosotros de vez en cuando 🙂
Un abrazo!