TARDE EN COMUNIDAD

Se nota que todos los vecinos tenemos ganas de buen tiempo, para bajar a las zonas comunes y ver cómo disfrutan nuestros hijos.

Hoy hacía un poco de frío, pero se podía estar un rato, así que bajamos los tres.

JAN se lo pasa genial jugando con sus vecinos, han estado jugando con la pelota y tirándose por el tobogán.

Los adultos hemos estado charlando y también hemos jugado con ellos.

Una bonita tarde de domingo. 🙂

VIERNES CON LOS PRIMOS

Esta tarde hemos ido a casa de los primos Nuria y Darío.

Ha sido una buena manera de acabar la semana y empezar el finde.

JAN estaba feliz, pese a que estaba agotado lo ha pasado bomba.

Ya son casi las 00:00 y todavía no se ha dormido, está tumbado en la cama con ellos tan a gusto. 🙂

¡Qué maravilla compartir ratos con sus primos!

NOCHES

Pues últimamente JAN se despierta por las noches medio asustado.

Le consolamos y a veces se vuelve a dormir, pero otras le cuesta bastante.

También pasa que se viene a la cama y sin que ni te des cuenta se duerme a tu lado. 🙂 Y entonces empieza la lucha por el espacio. Es tremendo. Je, je.

La verdad es que son muy cansadas estas noches de ajetreo, pero bueno, supongo que será una racha.

Ojalá que hoy no se despierte.

¡A dormir!

MARCELA

JAN tiene muchos muñecos. Con algunos de ellos duerme, con otros juega, pero su preferida es Marcela. 🙂

Marcela es un títere, en verdad es Rosi de los Fraggel Rock, pero JAN y Moni decidieron llamarla Marcela.

Es simpática, divertida, chillona, bromista, estornuda de vez en cuando y habla en argentino. Jajajaja.

Moni da vida a Marcela, yo me parto de risa cuando lo hace, y JAN y sus amigos se lo pasan bomba y se tronchan de la risa.

Hoy mismo hemos estado en casa de unos amigos y JAN se la ha llevado para jugar. Y ha sido una fiesta. 🙂

Algún día pondré un vídeo de Marcela en acción.

¡Genial Moni!


  

PEQUEÑO REBELDE

¡Menudo día rebelde que ha tenido JAN!

Esos días que dice a todo que no, que se rebela cuando le pides que haga algo…

Siempre me ha parecido muy importante que mi hijo muestre su necesidad, y la verdad es que hoy necesitaba estar así.

En algún momento nos hemos puesto serios y le hemos regañado, explicándole que tenía que obedecer. Es tan sentido que nos hacía pucheros y luego nos abrazaba.

¡Te quiero infinito brujito!