Esta tarde al salir del trabajo de Mónica nos hemos pasado por la escuela infantil la Paloma, que será donde empiece a ir JAN en septiembre.
Íbamos con un poco de respeto, ya que no la conocíamos por dentro.
No hemos podido verla entera pero la primera impresión ha sido buenísima. La conserje y dos cocineras con las que hemos hablado han sido muy simpáticas.
Encima en una de estas casualidades de la vida, nos hemos encontrado con la mamá ÁLVARO, un chico con síndrome de Down que está yendo a la Paloma.
Nos ha dicho que ella está encantada y que JAN va a estar fenomenal.
ÁLVARO es muy guapo, simpático y va muy bien. Habla bastante para sus tres añitos. Este año va a pasar al colegio de la Paloma.
Mónica y yo hemos salido muy felices, nos ha dado muy buena energía y una muy buena primera impresión.