Hoy hemos dedicado todo el día a ordenar la habitación de JAN y a deshacernos de aquellos juguetes con los que ya no jugaba y los que tenía de pequeño.
También hemos decidido dar la vuelta a la cama y convertirla en una un poco más alta que la que tenía. En la posición anterior JAN dormía a ras del suelo y con el techo más bajo, ya que había litera.
Cuando le hemos enseñado la habitación y la cama se ha entusiasmado. Se ha subido y no se quería mover, tenía que ir a cenar y no había manera de bajarle. Estaba feliz.
Hacía tiempo que no le veíamos tan contento y emocionado. 🙂
Jajaja, se le ve tan feliz al tío