Observo como Flopy y Patricia no dejan de mirar a JAN.
Lo miman con la mirada, lo observan con cariño, lo adoran.
Los segundos pasan a la velocidad de la luz y cada instante lo aprovechamos al máximo.
Se duerme poco y se disfruta cada momento a ritmo de mate.
Parece un sueño, pero es real, muy real… y nos hace inmensamente felices poder vivirlas, sentirlas, amarlas.
JAN cada vez pronuncia mejor sus nombres, cada vez las quiere más.
Que se pare el tiempo…
Os queremos.
Qué foto más requeteadorable =)
P.D.: Gracias por explicarme la expresión «tener pelusa», Bernardo =)