JUGANDO CON LA ARENA

…llevo a JAN en brazos hacia el pequeño parque. El tobogán y los columpios descansan sobre la arena sol y sombra. Dudo si sentar a mi hijo sobre la alfombra de piedras minúsculas. La decisión es directa y rápida. Siento a JAN y espero su reacción. El pequeño acerca sus manos hacia la arena con un ritmo sin igual. Amasa los minúsculos granos al compás del viento. Mueve sus manitas como bailando un tango con la arena. La levanta, la observa, la mima. Yo le miro con amor, con orgullo. Respiro. Siento su felicidad y me lleno de paz…