Hoy Mónica ha viajado por primera vez en metro sin mi ayuda, con el carro y con JAN.
Iba con una amiga, pero ella también iba con su hija y con el carro.
El caso es que ha llegado con la espalda fatal. Ha tenido que subir escaleras y escaleras llevando el carro en volandas.
Es indignante que no esté preparado el metro para los carritos de bebés… no me quiero ni imaginar la gente que va en silla de ruedas.
La verdad es que estas cosas, hasta que no le afectan directamente a uno, ni se las plantea… creo que tenemos que mirar más a nuestro alrededor… podríamos intentar cambiar muchas cosas.
Es muy fuerte, la gente veía como Mónica no podía con el carro y no se paraban a ayudar. Creo que pasamos por la vida a toda mecha y sólo tenemos ojos para nuestro ombligo… y siento que no hay mala intención, sino mala gestión de nuestras vidas.
Estos días que estuve afónico me empecé a plantear que hay gente muda… Y es muy fuerte porque hasta que a uno no le toca, desconoce.
A mi me pasó con el Síndrome de Down. Hace siete meses no sabía ni un 5% de lo que ahora sé.
Gracias JAN por hacernos ver…
estoy totalmente de acuerdo, en los estados unidos seria impensable tener ni un edificio o calle que no este disenado para silla de ruedas o carrito, por ley. Siempre me ha sorprendido que en Europa los metros no sean mas sensibles en este aspecto. Se lo he comentado a Gonzalo muchas veces.