A JAN le encanta comer en la mesa baja del salón sentados en la alfombra.
A mí me cuesta sentarme así y colocar las piernas para estar cómodo, pero le gusta tanto que de vez en cuando lo hago.
Es muy gracioso porque no le vale con sentarse él y que yo me siente en el sofá, necesita que me ponga a su lado en el suelo, y hasta que no me pongo no para.
Lo mejor es ver su cara de felicidad cuando por fin me siento a su lado.
A Moni también le encanta comer así. Jaja.
Voy a tener que hacer ejercicios de flexibilidad. 🙂
uuummhhh yo creo que me sentaria también, lo que no estoy tan segura que luego me pudiese levantar jajajaja