JAN no deja de sorprenderme, soy fan total suyo… 🙂
Por la noche durmió prácticamente de un tirón. Cuando le acosté me miraba preocupado sin saber cómo poner el brazo escayolado, pero le ayudé a acomodarse y cayó rendido.
Por la mañana se despertó sonriendo y decidimos que fuera al colegio.
Se montó feliz en el autobús y nos han dicho en el cole que ha estado muy alegre… bailando y todo.
¡Cuánto tengo que aprender de este pequeñajo!
Te amo.
Hay mi chatito q.narizota te salio en la fotografía con la naricita tan pequeñita qmtienes jajaja te quiero
Anda, pobrecillo JAN, a mejorarse ese brazo, un abrazo